No se por qué, pero lo mío con Mac es absolutamente una lotería, y os cuento.
No es que sea la peor sombra de ojos que he probado, pero estoy profundamente decepcionada con ella.
En el stand fué un flechazo, en el tester parecía mucho más cremosa e iridiscente, de un rosa melocotón ligeramente escarchado que me dejó extasiada, casi con síndrome de Stendhal. Pero al llegar a casa con mi flamante sombra nueva, ¡sorpresa! , la textura totalmente distinta que en el probador, y al aplicarla en la piel, si intentamos difuminarla se desvanece dejando el párpado casi desnudo.
La tengo desde hace casi dos meses, y he intentado darle tanto uso como he podido, combinándola con diversas sombras y pinceles, pero no hay nada que hacer, cada vez que intento difuminarla un poco, el color se pierde. Sé que lo que voy a decir sonará asqueroso, pero yo atribuyo la cremosidad del probador a que media humanidad ha metido su dedo en él , está curadita vaya, y curiosamente el efecto es mucho más bonito que cuando te la dan nueva.
Otro defecto que le encuentro es que se va al pliegue rápidamente, con una prebase debajo el problema se resuelve, pero...caray, que cuesta 18 €, perdonenme señores de Mac por pretender que dure un poco más en condiciones...
Dedico estas últimas líneas al embalaje: se presenta en una caja de cartón negra que contiene el estuchito tradicional de plástico rígido, redondo, con un cierre firme, que mantiene a buen recaudo la sombra del exterior. A mí no me gusta depotar sombras y soy de las que prefiere conservarlas así individualmente, me resultan mas bonitas dentro de su envase, y ya sabemos que los de Mac son especialmente elegantes.
A pesar de tan gracioso "packaging", no puedo por menos que desaconsejaros invertir en ella, porque se queda corta a muchos niveles, y larga en cuanto a coste.